Como podréis adivinar por la portada esto va de piratas. Historias de otra época, donde los autores tenían que conseguir que los lectores volvieran cada semana a por sus ración de aventura. Continuos cliffhangers que en este formato integral se llevan mucho mejor pasando una página que teniendo que esperar semanas, pero que cumplen de igual manera su misión de entretenernos durante horas y horas.
"Las prodigiosas aventuras de un muchacho que se ve inmerso en combates sin piedad y los abordajes desesperados que enfrentan a piratas y marineros del Rey en los prestigiosos tiempos de la marina a vela."
Que nadie busque aquí narrativas experimentales o cómic de vanguardia. Barbarroja es puro clasicismo, aunque si tenemos en cuenta la fecha de publicación original de esta obra hay que reconocer que Charlier y Hubinon ya tenían una cierta querencia por la planificación y la puesta en escena.
Si siempre estáis a las puertas de llevaros un clásico a casa pero a última hora los prejuicios y las dudas sobre el paso del tiempo os echan para atrás, atreveros con este Barbarroja con todas las garantías posibles.
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