miércoles, junio 20, 2012

Una colmena en construccion




El regreso de Luis Durán, uno de los autores más prolíficos de nuestro panorama, llega como una grata y esperada sorpresa. Después de pasarse más de una década realizando cómic tras cómic como un poseso, llegando a publicar hasta tres obras en un mismo año, parecía que Durán se había cansado de este mundillo, desapareciendo del día a la noche sin dar señales de vida. Casi un lustro después de su última aparición, y sin que nadie lo esperara, vuelve a la estantería de novedades.

Sinceramente, en su momento yo fui uno de los que pensaba que Durán necesitaba una pausa en su camino. De la sorpresa inicial de sus primeros trabajos, pasamos, por saturación, a un hartazgo. Miraras donde miraras, una obra de Durán estaba cerca, y ya sabéis que nada es bueno si se toma en exceso.

Para su regreso, Durán sigue siendo el mismo de toda la vida, pero mejorado. Esta colmena en construcción respira los mismos aires que anteriores obras, con esa mezcla entre lo real y lo onírico, tan próxima al realismo mágico y con una revisión de lugares del pasado que habitualmente nos llevan hasta la infancia.

Es esta una obra coral, donde es difícil dar una rotunda respuesta a la pregunta sobre de qué va este cómic. Una trama diversificada, con muchos personajes que poco a poco se van aproximandos, pero que en ningún momento se mueven por una dinámica rígida o establecida. De hecho, el peso de la narración, lo llevan estos personajes en sí mismo, en sus acciones y relaciones, en sus pensamientos, construyéndose toda la acción entorno a ellos. Sí que es cierto que se ve que Durán sabe adonde quiere llegar, punch final incluido, si bien a lo largo del tebeo no se le ve demasiado preocupado por llegar allí.

Resaltar también lo cuidado del acabado de este nuevo trabajo, tanto en su diseño narrativo como en su acabado gráfico. Esta claro que Durán es uno de esos autores con un estilo muy personal, que entra o no entra por los ojos, pero se ve que en esta obra se tomó su tiempo, algo que sin duda es de agradecer y que no deja de enriquecer el conjunto final.

Un regreso esperado, y confío que celebrado, que recompensara la espera de los fans del autor, y que permitirá a muchos lectores conocer a uno de los autores de referencia en nuestro país, no hace mucho tiempo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

"...De la sorpresa inicial de sus primeros trabajos, pasamos, por saturación, a un hartazgo. Miraras donde miraras, una obra de Durán estaba cerca, y ya sabéis que nada es bueno si se toma en exceso".

Y También sabemos lo mal visto que está trabajar en este País...